La propuesta gastronómica del noreste de los Estados Unidos lleva más de un año navegando por tierras madrileñas. Más concretamente en Malasaña, barrio en el que se geolocaliza The Lobstar, el restaurante de estilo americano que trae a pleno corazón de la ciudad la auténtica comida de la costa de New England.
Con la llegada del frío, la propuesta marina de The Lobstar toma nuevo rumbo, desde los entrantes hasta los principales. En este nuevo viaje te embarcarás en la aventura de explorar todas las posibilidades que ofreceeste espectacular bogavante, que traen vivo semanalmente desde Maine (Estado donde el bogavante es uno de los manjares por excelencia).
Lobster Plates son los protagonistas de la nueva carta. Dos nuevos platos de bogavante que se cocinan con dos técnicas totalmente diferentes.
La primera propuesta es el Portland Fried Lobster, una cazuela de bogavante frito en aceite de oliva y hierbas aromáticas. La segunda opción es la Freeport Grilled Lobster, bogavante a la parrilla acompañado de una reducción de mantequilla muy especial. Un plato típico de la cocina americana, que en The Lobstar le dan su propio toque y que promete convertirse en el plato estrella del invierno.
Como las novedades en alta mar nunca llegan solas… The Lobstar ha incorporado un par de platos más para completar la nueva carta. Como la Clam Chowder, una sopa cremosa de almejas, bacon y patatas, un plato de temporada que vuelve durante los meses de más frío. Más allá de los Lobster Plates y la Clam Chowder, se incorporan entrantes como los Rockport Fried Calamari(calamares fritos acompañados de salsa marinara), las New Haven Artichoke & Spinach DIP (Dip de espinacas y alcachofa con queso fundido que se acompaña de tortillas caseras), las Lobster Croquettes (croquetas de bogavante) o las Crispy Prawn Bites (bolitas de langostino). Y, por supuesto, la Lobstar Salad, una ensalada que acompañan con aguacate, tomate cherry, maíz y bogavante. Un light way para los que nunca descuidan la línea.
Otras especialidades que ganan peso en este viaje son elLobster Bisque (sopa cremosa de langosta) y la Lobstar Pasta (plato de pasta larga con bogavante), una propuesta que no podía faltar tras el éxito cosechado por la mítica Lobstar Mac & Cheese (macarrones con queso y bogavante), uno de los platos insignia del restaurante.
Con el afán de crear una experiencia totalmente americana se suma a la carta la mazorca de maíz, típica de los Estados Unidos. Tanto en guarnición (a elegir entre patatas fritas especiales, bastones de boniato frito o mazorca de maíz) como en formato entrante con el Corn on the cob, una mazorca de maíz que se acompaña de mantequilla derretida.Las novedades marinas también afectan a la propuesta cervecera. En barril renuevan su grifo con Estrella Galicia y amplían sus referencias artesanas en botellín -O’hara’s Irish Pale Ale, Erdinger Weissbier, Samuel Adams y Brew Dog Punk IPA-. En cuanto a la carta de vinos, se incorpora la posibilidad de pedir los vinos de la casa por copa.
Otra gran novedad es su cóctel bar, una nueva zona situada en la planta inferior del restaurante. Un espacio multidisciplinar que se utiliza tanto para eventos privados como bar nocturno para tomar la última copa de la noche. Sin duda, el club perfecto para echar el ancla tras la cena.
The Lobstar es un homenaje a USA y al mar. Tanto la decoración como la carta rinden tributo al bogavante del noreste de los Estados Unidos, una zona donde es típico criar, pescar y disfrutar de este peculiar crustáceo. Este manjar marino y esta tradición costera también se reflejan en el ambiente y la decoración del espacio. Desde el hilo musical (del que salen temazos míticos de Led Zeppelin, Queen, David Bowie o Bruce Springteen) hasta las paredes (en las que cuelgan cuadros de las casas de los pescadores de Maine y otros paisajes marítimos de la zona).
THE LOBSTAR
Calle Carranza, 4